¿Hay crisis en el grupo de gobierno? No sabemos aún la respuesta, pero lo que sí está claro es que hay problemas serios en el PP. El alcalde prescinde de Guadalupe del Río, artífice de una parte muy importante del éxito electoral de su partido, y la desposee de casi todas sus competencias. Lucas Bravo, en su afán por controlarlo todo, le asigna ahora Asuntos Sociales a una persona de su confianza, de las que no le van a cuestionar ninguna decisión, y la promociona por encima de otros concejales a priori mejor colocados y que estaban esperando una mejora.
Por otro lado, los verdes ganan competencias, concretamente Turismo y Deportes. En el caso de Turismo, el cambio parece claro, es difícil llevar la Concejalía peor de lo que la ha llevado Paula Rosa, y por otro lado, Amalia necesita algún campo en el que poder moverse dada su absoluta inoperancia e incompetencia para mover la Concejalía de Urbanismo y su principal papa caliente, el Centro Comercial. Aún así ¿Por qué se premia a los verdes asignándoles más competencias? El centro de gravedad de este gobierno se desplaza hacia el lado de los Verdes, aunque las líneas que separan a populares y verdes son cada vez más imperceptibles ¿tal vez necesita Lucas tenerlos más satisfechos para asegurarse la mayoría en previsión de deserciones entre los suyos?.
El caso más difícil de explicar es el de Emilio Ventura, el "verde". El de la dedicación parcial, el mismo que dice en un juicio que no tiene tiempo para asumir sus funciones como concejal de tráfico y por eso permite que sus compañeros ordenen que se arranquen las señales de tráfico que les molesten. Pese a esa confesada falta de tiempo e incapacidad para cumplir con sus tareas, Emilio Ventura, asume ahora también la concejalía de deportes. ¿Se está preparando una nueva dedicación plena y por tanto un mayor coste para las arcas municipales tras esta remodelación?.
Por cierto que la concejalía de deportes que los verdes asumen es la misma que Lucas Bravo abandona una vez que se ha consumado el descenso a segunda B del Villa de Santa Brígida. Suponemos que entre los cálculos de Lucas para repartir concejalías se ha tenido en cuenta el descenso en la rentabilidad electoral que aportarán a partir de ahora el palco del estadio y el balcón del Ayuntamiento.
Nos mantenemos observantes ante esta nueva situación y veremos cuáles de nuestras sospechas se van concretando en los próximos días y qué repercusiones tiene esta maniobra en la estabilidad del Ayuntamiento de Santa Brígida.